Mala Xp con Brigitte de Mimosas

Explorador · 6 de Mayo del 2012

Quisiera relatar mi mala Xp con Brigitte de Mimosas. ¿Cómo poder justificar que terminé visitando a esta mujer? Unos cuantos días atrás en el blog encontré una referencia muy interesante sobre Melisas de Mimosas. Llamé a la mujer en cuestión en tres oportunidades en diferentes horarios, las tres veces me dijo que tenía un turno libre luego de las 19 hs. Lamentablemente, estas dos últimas semanas ese horario se complicaba para mi en demasía. Así fue que, en primer instancia decidí visitar a Analía del PV de Maipú 3XX (me abstengo a publicar una nueva Xp con ella, ya que lo hice varias veces y no tengo nada más que agregar) y luego, revisando el foro encontré que Melisa (Escort Melisa Acompaante Mimosas Argentinas) estaba con otra mujer trabajando. Así llegué al link de esta tal Brigitte (Escort Brigitte Acompaante Mimosas Argentinas).

Vuelvo a la pregunta inicial ¿Qué razón me llevó a estar con esta porneia? ¿Fué acaso un estado de desesperación? ¿Se debió, tal vez a su fuerte parecido con una compañera de trabajo? ¿Tal vez a una lejana referencia a una profesora de mi primera juventud? No lo sé... sólo sé que el viernes, luego de salir de terapia y con una copa de vino en sangre abrí mi agenda y de las tres opciones que tenía, la única libre era Brigitte. Aclaro que había intentado comunicarme con Melisa,a quien tengo marcada como «pendiente», empero estaba ocupada.

Revisé las fotos y me dije «si... ¿por qué no?» La primer sorpresa radicó en la dirección. Mientras que Melisa (supuesta compañera en las faenas de la lujuria) me dió como dirección una casa cerca del Domus Pilates, Brigitte me indicó la de Perón al 12XX, justo frente a la Sede Central de la Masonería argentina. Para mi sorpresa estaba prácticamente a la vuelta.

Pagué mi consumisión y rechacé la tentación de un taxi por tan pocas cuadras. La calle Perón a esa altura es tranquila, hay poca gente a esa hora (eran las 20:00 hs) y el edificio de la Masonería cuenta con seguridad y está bien iluminado, por lo que no es inseguro para nada. El edificio donde atiende esta dama madura es una casa de viejo porte, puertas altas de madera con molduras de bronce. Se trata de una casa, no de un departamento, por lo que hay un solo timbre. Toqué y la misma voz con un acento del noroeste preguntó quien era. Dije mi nombre y me abrió. Al final de una escalera estaba esta mujer, con un vestido negro con flores lilas y una chaqueta de cuero corta, color púrpura, botas altas marrones de baja calidad. El cabello teñido de rubio (típico de las mujeres entradas en edad para disimular las canas) estaba debilitado por los químicos y parecía muy frágil a pesar de ser largo.

Me recibió con un beso y la verdad que ahí comenzó a desagradarme un poco. No obstante una amiga me había avisado que no podríamos cenar y quería sentir otro cuerpo. Debajo del vestido parece bien formada, no lo niego, aunque la cara no la ayuda. La nariz es más larga que en las fotos y tiene la cara con mayores marcas de edad. La casa, como dije es vieja, más o menos de los años “40, restaurada. La habitación donde atiende está a un costado, hay un patio interno donde está el baño y hacia otro extremo una cocina. La habitación es amplia y estaba con la calefacción encendida, hacía muchísimo calor y tenía la televisión encendida con C5N informando sobre el nuevo interventor de YPF (sor un orgulloso neoliberal), ella me acompañó, me pidió que me pusiera cómodo y me dejó solo con un «ya vuelvo».En dos minutos apareció y me invitó al baño. Me higienicé y volví... no estaba. Me hubiera ido de no haber pagado antes... pensé «esta jovata tal vez es muy buena, hay que esperar». Aproveché para cambiar de canal y apagar el aire acondicionado. Me quité los gemelos de la camisa y los zapatos y apareció Brigitte. La habitación tiene, además de una cama de dos plazas y media una camilla para masajes sensuales... sobre ella una foto de cuerpo entero de la señora. En un movimiento que no vi venir me besó metiendome la lengua hasta la garganta, al principio me calentó pero sentir esa lengua gruesa recorriendo mi boca me provocó rechazo... ya estaba mal. Se desvistió. El cuerpo muestra a una mujer que en una época estaba bien pero que ahora está en decadencia. Las tetas están hechas pero mal, son más chicas que en fotos, duras y un poco separadas.

La metí mano igual, gemido forzado e irreal acompañado de un «así me gusta» con un acento fortísimo que no pude identificar (luego me dijo que era de Santiago). Se puso de rodillas, tomó mi miembro, fue a los testículos y entonces... le puso un profiláctico.

-Prefiero sin...

-Yo lo hago asi -me contestó mientras se lo metía.

La felación no estaba tan mal, pero ya estaba embroncado, después se acostó y ahí empezó la faena. Mecánica, poco imaginativa me iba «indicando» las posiciones mientras daba esos gemidos que me enfurecian. En un mommnto, cansado la agarré de la cintura, la di vuelta (ni yo pensé que tenía esa fuerza) y poniéndola en cuatro le emepecé a dar... ¡Dios de mis padres! ¡Qué feo espectáculo me dió ver esas nalgas! Inexistentes, malformadas, horribles y no sé si fué psicológico pero sentí un hedor leve, proveniente tal vez de su vagina cercano al del pescado. Le estuve dando y no podía venirme. ¡No podía! La vieja me soltó «dejame descansar». Me recosté y se puso a mi lado, me habló de boludeces que no me interesaban. Insistió en que había transpirado mucho y entonces le largué:

-¡Chupala!

Se puso a hacerlo con más dedicación que la primera vez. Cerré los ojos y traté de imaginar a otra mujer. Le di un rato más, me fijé la hora en la televisión («¡Vieja de mierda! ¡Pusiste otra vez ese canal!») y apuré. Quería irme de una jodida vez. La empujé, la dejé boca arriba, me quité el profiláctico y me masturbé, mientras lo hacía me repitió tres veces «en la cara no», y me corrí en sus pechos duros y mal operados.

Largó un comentario tan grosero como desagradable (« Tenías la Serenísima»), la miré con desdén y le pedí permiso para ir al baño. Me higienicé un poco y volví. Trató de mantener una conversación pero le contesté con monosílabos. Me vestí y salí, poco antes de que se cumpliera la hora.

Conclusión: no vuelvo ni en coma alcohólico.

· Servicio: 6

· Depto: 8

· Edad aparente: 60

· Cara: 4

· Tetas: 5

· Colita: 3

· Cuerpo en general: 4 (promedio cara, tetas y cola)

· Relación con las fotos: 55% para abajo.

· PT: 5 (con y sólo un rato muy corto)

· Besos: si, demasiados.

· Garching: 6

· Relojea?: no, pero intenta que pierdas el tiempo.

· Onda: 7

· Reincidencia?: Ni loco.

· Cobra por adelantado: si.

· Telefonos: en la página.

· Gift: 200 la hora. No le dejé propina.

Maduro Pirata · 6 de Mayo del 2012