llamé, me fui, tomé el masaje común y me quedó una seria duda de si era ella! La chica era rubia, si bella de cara, no tenia un culo de cuadro, es Uruguaya y al lado había ruido a otro señor y otra masajista. Pero como no quería bajonearme la tarde, me entregué y recibí: buenos masajes con conocimiento, toda la información de su origen Uruguayo, sus dos hijos, del exmarido, de las niñeras y de las cirugías plásticas y una paja donde ponía una cara de libidinosa que hace mucho rato no la veo - y esto me convenció de que valió la pena hacerme el distraído por el cambiazo y de volver por el original.