Malas no tantas, pero había dos chicas de Flores que eran compañeras, yo me serruchaba siempre a la más flaquita, preciosa, rubia de ojos verdes, la compañera se llamaba Carla, no estaba nada mal, pero no me iba su onda, un día voy a ver a Tammy (la rubia) y no estaba, dije bueno vamos a ver que onda con Carla, fue un primer polvo rápido y se desató la tormenta de celos profesionales, me empezó a gritar en el telo, que no sabía porqué la rechazaba, que ella no tenía tantos clientes como su amiga etc, etc, hasta que de la calentura agarra y me rompe el celular contra una pared, abre la puerta y se va, si que ni siquiera le hubiera pagado. De ahí en más nunca más vi a ninguna de las dos, de terror.